¿Cómo desarrollar la capacidad de escuchar?

Como lo prometí en entradas anteriores, quiero compartir sobre las habilidades de comunicación. Hace poco escribí sobre la asertividad y hoy quiero compartirles sobre la habilidad de escuchar.

Escuchar es todo un arte. Más que hablar lo que tenemos que aprender primero es a escuchar, por ejemplo, si te pones a pensar, todo gran líder es una persona que sabe escuchar.

Esta es una entrada corta y sencilla, sin muchas pretensiones, para dejarte unas ideas de cómo desarrollar la escucha.

Ciertamente, no es casualidad que tengamos dos orejas y solo una boca. En estricta correlación con la anatomía humana, escuchar es doblemente más relevante que hablar.

Sin embargo, es común la falta de escucha. En parte porque a decir verdad estamos llenos no solo de ruido externo sino tambien de mucho ruido interno, con todos los pensamientos que circulan por nuestra cabeza a cada segundo.

Pero adicional al ruido hay otro detalle detrás de la falta de escucha. Poco se lo menciona porque pasa desapercibido y porque es bastante desconocido. Tiene que ver con una gran era patriarcal en donde los valores y los principios femeninos se despreciaron bastante. 

Resulta que la capacidad de escucha está íntimamente ligada a la receptividad, una cualidad de la energía femenina.

De manera que sin que nos percatemos mucho del tema, quienes mejor desarrollan la capacidad de escucha son también quienes se convierten en personas empáticas. Esto tiene todo el sentido porque ambas surgen cuanto más se equilibre la energía femenina tanto en hombres como en mujeres.

Esa tarea resulta de gran importancia porque si te das cuenta la escucha y la empatía son en muy buena medida las responsabies de una correcta construcción de confianza con el iterlocutor.

Los niveles de escucha

En efecto, la escucha es aquella actitud que nos permite diferentes niveles de poner atención al mensaje que nos llega por el sentido auditivo desde nuestro interlocutor.

Podemos tan solo oír lo que nos dicen, o ir mucho más allá de escuchar con los oídos para escuchar con el alma y el corazón, tratando de comprender además del mensaje, también los sentimientos del interlocutor.

La capacidad de escucha está relacionada con las otras habilidades de comunicación. Por tanto, al aprender a escuchar, podemos impulsar el desarrollo de la empatía y de la asertividad.

De otro lado, la capacidad de escucha aumenta en la medida en que nos conocemos a nosotros mismos. Así pues, cuanto más avanzamos en el autoconocimiento, mayor facilidad tendremos de elevar el nivel de escucha hasta llegar a la excelencia que supone ponernos en el lugar del otro para comprender desde qué lugar nos habla.

Tips para desarrollar la escucha

Algunas recomendaciones para desarrollar la escucha son:

1. Controlar los impulsos que nos incitan a interrumpir al interlocutor.
2. Tomar notas de lo que nos van diciendo.
3 3. Reflexionar sobre lo que hemos escuchado.
4 4. Eliminar los juicios y prejuicios, para evitar ruido interno mientras nos hablan.
5 5. Validar lo que escuchamos con gestos o con palabras.

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